Sí, muy aconsejable, pero debe estar supervisada por un profesional. Los principales beneficios son la disminución de la resistencia a la insulina y un mejor control metabólico.
Tanto en tipo I, como en tipo II, debemos planificar con mucho cuidado la actividad a realizar, así como la alimentación, en relación con la administración de insulina, para poder mantener la glucemia a niveles óptimos, siendo de vital importancia en el tipo I, ya que una mala planificación podría llevar a una hipoglucemia e incluso a un coma diabético. En tipo II, con una buena planificación, se puede disminuir o incluso eliminar la necesidad de fármacos.
Por: Fernando García
Imagen en: https://goo.gl/93u8Gg