El aumento de la esperanza de vida en la sociedad del primer mundo tiene una asociación directamente proporcional con el aumento de la prevalencia de las enfermedades neurodegenerativas en la población.
El Alzheimer se postula como la demencia senil con mayor número de enfermos, siendo actualmente 24 millones de personas en el mundo que padecen dicho deterioro y que, puede duplicar en 2040 dicho número de afectados.
En el caso de la población española, la prevalencia de la EA alcanza el 7,7% entre los mayores de 70 años, y aumenta hasta el 16,2% en las personas con más de 85 años. El coste económico de la demencia es elevado y en España oscila entre 27.595-30.525 euros por paciente y año.
La EA se enclava en las patologías amiloidosis localizadas seniles; donde se produce por la acumulación de las proteínas Beta-2-amiloide que se depositan en las paredes de los vasos cerebrales (vasculopatia contófila), y constituye la lesión fundamental en las placas neuríticas (maraña de fibras y axones engrosados que confluyen en un núcleo con amiloide). Como consecuencia de esta degeneración del parénquima cerebral, se ven comprendidas la degeneración de las neuronas y su posterior lesión, donde la sintomatología propia de la enfermedad se ve afectada la memoria, los fallos progresivos del lenguaje y desorientación.
En la Enfermedad de Alzheimer la capa histológicamente degenerada, es el Asta de Ammón del hipocampo por neuronas piramidales, rodeada por la capa molecular, que es donde paran los axones.
La ausencia de métodos diagnósticos y tratamiento altamente efectivo y el propio desarrollo clínico de la enfermedad, ha sido el punto de partida para que un grupo de científicos de laboratorio de NeuroEpigenética en el centro de Investigación biomédica de Navarra pusieran en marcha un proyecto.
Sin embargo, dicho proyecto científico tiene una particularidad que lo hace peculiar: su financiación. Su fuente de ingreso se realiza mediante una página web denominada “Precipita”, idea de la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología (FECYT) y el novedoso y actual método de Crowdfunding para financiar la investigación de dicho estudio. Originales en: https://goo.gl/4W8XcO
Desde el punto de vista de financiación, la cantidad de dinero destinado va a elección de la persona que colabora en dicho proyecto ya que no se suscribe a ningún mínimo, y toda donación, queda debidamente regulada con su posterior envío de los resultados del proyecto y carta de agradecimiento de los colaboradores.
El principal objetivo de la investigación científica es la identificación de biomarcadores epigenéticos de la enfermedad, que se pueden extraer en un análisis de sangre al igual que mecanismos moleculares de la enfermedad con el objetivo del tratamiento.
La búsqueda es en el propio hipocampo que se ve afectado, donde dichos cambios epigenéticos y desde el punto de vista histopatológico, intentan encontrar las modificaciones en el genoma de las células de la sangre. Por tanto, dicho proyecto de investigación aborda los dos pilares fundamentales que actualmente se muestran como necesarios para afrontar dicha enfermedad.
El nivel de método diagnóstico reside en cómo la imposibilidad de una atracción de un fragmento de hipocampo, se ve reflejado en ese deterioro a nivel plasmático (sangre) como un método mucho más rápido.
El principal objetivo del estudio queda reflejado en el Dossier del equipo: “ Este proyecto beneficia potencialmente a todos aquellas personas que comienzan a tener síntomas o están en riesgo de desarrollar la enfermedad de Alzheimer. En este grupo de personas, el uso de técnicas para realizar un diagnóstico precoz y preciso de la enfermedad, será fundamental para planificar los cuidados tanto del paciente como del núcleo familiar”.
La publicación de dicho proyecto ya ha alcanzado el mínimo económico requerido por donaciones voluntarias de manera que puede seguir en marcha. Los directores de la investigación fijan además, un mínimo para la publicación de los resultados del artículo científico, y si supera dicha cifra, otro margen para financiar el contrato de un investigador predoctoral que se incorpora al grupo de Neuroepigenética.
Sin embargo, este micromecenazgo científico tiene sus detractores y simpatizantes. “Es la primera vez que se plantea una comunicación directa entre los científicos de centros públicos españoles y los ciudadanos», afirma José Ignacio Fernández, director general de la FECYT. El responsable de la fundación se siente orgulloso del proyecto, que este año ha conseguido superar en casi 50.000 euros las donaciones para I+D obtenidas el año anterior.
A pesar de ello, diferentes personalidades públicas importantes en el mundo científico han marcado un punto de inflexión ya que el crowdfunding no sostiene una financiación a largo plazo y de manera continuada como método de subsistencia y oxígeno de dicho I+D.
Por otro lado, es innegable la parte positiva de la concienciación hacia la sociedad y la importancia de la ciencia. Y más, conseguir que sean representativos estos ingresos o involucrar a la sociedad de manera más activa hacia la concienciación de dicho ámbito social.
Se muestra por tanto, una gran diferencia en el sistema de financiación europeo con el estadounidense, y se abre además, el debate de si la caridad tiene que sustituir a la responsabilidad del Estado, con cada vez más dejadez y mayor delegación en el prójimo, ya que esto sería funcional para rellenar huecos o pequeños errores del sistema, pero no para sobrevivir o sustituir dicha efectividad.
Raquel Acosta Hernandez
Referencias:
https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed
http://elpais.com/elpais/2015/10/12/ciencia/1444637387_416349.html
https://www.precipita.es/descubre.html
Guzman Ortuño Pachecho, Martinez Diaz Fc J. et cols. Anatomía patológica general para estudiantes de medicina. 3º Edición, Murcia. Diego Marín.
Original en: https://goo.gl/P3fWTM