Algunos alimentos naturales pueden tener más peligro incluso que los procesados. En la época de la quimiofobia, a veces olvidamos que la naturaleza tiene sus propios mecanismos de defensa, como por ejemplo los frutos venenosos.
Es el caso de la pera roja o árbol de seso (Blighia sapida), que crece habitualmente en la zona de África Occidental. El fruto no maduro de esta planta contiene hipoglicina A y B, unos compuestos tóxicos que, tras ser metabolizados, producen inhibición enzimática en la degradación del acil coenzima A por unión irreversible a la coenzima A y transferasas de la carnitina. En consecuencia, la beta oxidación también se inhibe, se reduce el aporte de ATP, NADH y acetil CoA, y se produce hipoglucemia con mareos y vómitos severos. Esta condición se conoce como “Enfermedad Jamaicana del vómito”.
Fuente:
Goldson, A. (2009). The ackee fruit (Blighia sapida) and its associated toxic effects. The Science Creative Quarterly.
Imagen. Edición propia.
Por Mar Sánchez